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Coneixements, representacions i usos del català

Oportunidades que se pierden por no hablar bien inglés

04 febr. 2012

El idioma inglés sigue siendo la asignatura pendiente española en la diplomacia, el empleo, el turismo, el comercio, las finanzas y las relaciones personales. Sólo los rusos y los turcos están peor que los españoles en el conocimiento de esa lengua.
Todos lo ven importante, pero casi nadie lo estudia

LA sociedad y la economía españolas pueden estar pagando caro andar escasas de un bien intangible, pero de valor incalculable en la diplomacia, el empleo, el turismo, el comercio y las finanzas internacionales o simplemente las relaciones personales en un mundo global: el inglés.

Las estadísticas son coincidentes y contundentes, esta lengua sigue siendo asignatura pendiente de la formación en España. “Hemos perdido muchísimo tiempo” en algo “estratégico”, advierte el presidente del Consejo General de Colegios de Economistas, Valentín Pich. Supone un “daño” para la economía nacional y las nuevas generaciones, pero es un problema que no puede resolverse rápidamente, subraya, sino que requiere una “reforma estructural” de políticas de Estado a largo plazo, a veinte años.

El déficit de inglés de gran parte de la población joven y de edad mediana debería haberse superado hace diez o quince años, coincide el director de Formación y Emprendimiento del Consejo Superior de Cámaras de Comercio (CSCC), Ángel Colomina.

Únicamente por delante de rusos y turcos, los españoles están entre los europeos con peor inglés, prácticamente igualados con los italianos en un nivel bajo de media, según un estudio de 2011 de la empresa de cursos en el extranjero Education First.

La Comisión Europea informó ese año de que hasta el 58% de los españoles deja escapar información destacada en Internet por desconocer la lengua.

Para mitigarlo, administraciones públicas, empresas y familias gastan cientos de millones de euros en el aprendizaje, pero parece que una mejoría generalizada en el conocimiento de la lengua franca de nuestro tiempo tardará aun.

Idiomas y mercado

Mientras tanto, en momentos de recesión, se están perdiendo oportunidades de empleo aquí y en el extranjero y de crecimiento económico. Y se hace más necesario el inglés, dice Colomina, cuando llegan cada año millones de visitantes que no hablan español y que suponen un aporte muy importante al PIB nacional.

El dominio de idiomas permite acceder a un 27,55% más de ofertas laborales, y el más solicitado por las empresas es el inglés (72% de ellas). Son datos de un análisis de 2011 de Adecco e Infoempleo, que constata que cada vez más empresas españolas establecen relaciones exteriores. Además, el número de españoles demandantes de empleo en el extranjero se ha duplicado desde 2008, y representan el 10% de los que buscan trabajo a través de Adecco.

Un estudio del CSCC de 2005 indica que más del 60% de las empresas que necesitaban personal con idiomas detectaban carencias entre los aspirantes. En cualquier caso, los aspectos formativos menos requeridos entonces por las empresas eran idiomas y nuevas tecnologías, una mentalidad que es necesario cambiar, según Colomina. El inglés es fundamental para escalar en las estructuras empresariales e institucionales, insiste Pich, así que no se trata de chapurrearlo. Cerrar un negocio, ilustra Colomina, exige un vocabulario adecuado, saber argumentar y defender unas ideas y convencer a un cliente. Ahora, en las “vacas flacas”, hay empresas que se plantean salir fuera y se encuentran con la barrera del idioma, lo que “frena la competitividad”, asegura Colomina. Según Pich, valorar la repercusión de las carencias en inglés en el PIB es una cuestión un tanto “filosófica”, pero las ventajas de dominarlo son todas.

Nueve de cada diez españoles adultos consideran muy importante conocer alguna lengua extranjera, pero no estudian ninguna, tal vez porque el 74% asegura que nunca ha sentido desventajas laborales por no hablarlas, según una encuesta del CIS de 2010. La mayoría de los que estudiaban idiomas entonces aducía motivos de trabajo (45%) y sólo el 23% se reconocía capaz de hablar y leer en inglés con fluidez. La Ley Orgánica de Educación (2006) adelantó a los cinco años el aprendizaje de una lengua extranjera y hay autonomías que han hecho bandera de los colegios “bilingües”.

El Ministerio convocó ayudas por más de 51 millones de euros el año pasado para cursillos en el extranjero (41 millones se destinaron al inglés).

Cien mil españoles salen anualmente a perfeccionar idiomas. Incluso este curso ha aumentado más de un 20% la matriculación en un año académico de secundaria en otro país, según la Asociación Española de Promotores de Cursos en el Extranjero (ASEPROCE).

Font: Diario de Navarra

Pich alerta contra los esfuerzos dinerarios “brutales” de las familias, pues se necesitan políticas de Estado desde la infancia. Así, reclama que se generalicen las proyecciones cinematográficas y las emisiones de las televisiones públicas en versión original subtitulada.